A L.·. G.·. D.·. G.·. A.·. D.·. U.·.
LIBERTAD – IGUALDAD – FRATERNIDAD
R.·.L.·. Joven Mendoza Nº 430
Plancha en Grado de Aprendiz:
“A CUBIERTO”
Or.·. de Mendoza 6 de octubre de 2021 (e.·. v.·.)
V.·. M.·. y QQ.·. HH.·.:
“¿Cuál es el primer deber de todo francmasón en logia?
Asegurarse si la logia está debidamente a cubierto interior y exteriormente.
¿Cuándo está a cubierto la logia?
Cuando los profanos están alejados y la influencia de la vida profana apartada.”
(del catecismo del Aprendiz Masón)
Estas preguntas con sus respectivas respuestas forman parte del reteje para disipar dudas sobre la condición masónica de alguien. Analizaremos brevemente el concepto “a cubierto”, sus implicancias simbólicas y ritualicas.
El simbolismo:
Generalmente la mayoría de las obras arquitectónicas, en especial los templos, salvo excepcionales casos de templos a cielo abierto, llevan una cubierta (un techo). Tal es el caso de las catedrales góticas que erigieron nuestros antecesores los masones medievales, de los cuales heredamos nuestros símbolos. Sin querer entrar en detalles arquitectónicos solo remarcar que la construcción de las bóvedas fue evolucionando del románico al gótico, de tal manera de quitarle soporte estructural al techo trasladando el peso a las columnas y utilizando el techo solo como “cubierta” para proteger el edificio de las inclemencias externas.
Interpretaciones
Si el templo no quedaba debidamente a cubierto “bien techado” pues podía lloverse. De aquí heredamos la famosa costumbre de que cuando se hablan temas masónicos y se acerca un profano, un interlocutor advierta al otro haciendo mención a la lluvia (“llueve” “está lloviendo”, etc.) lo mismo con conversaciones entre distintos grados masónicos.
El templo masónico, no es solamente el edificio donde funciona la logia, sino toda una construcción entre los símbolos físicos y las significaciones rituálicas, por eso decir “a cubierto” significa, por un lado, que no haya profanos en las inmediaciones, y por otro más importante en nuestros tiempos, que no haya profanidad dentro de la logia, es decir, que la dejemos afuera del templo.
La aplicación en el ritual:
En los trabajos en logia, el primer deber de los Vigilantes es cerciorase de que el Templo esté a cubierto exteriormente. En los ritos que poseen Guarda Templo Externo, los vigilantes le comunican a través del Guardatemplo Interno para que verifique la parte exterior. En los ritos que no, esta tarea la hace el experto ya que es quien puede salir por estar armado. Asimismo, saldrá para retejar a cualquier desconocido en el caso que sea necesario.
El segundo deber de los vigilantes es verificar que el templo este a cubierto interiormente, por lo tanto, inspeccionan a los obreros de sus columnas verificando que éstos sean masones.
Una vez que se ha verificado esto recién pueden abrirse los trabajos. Es conveniente aclarar que antes de abrirse los trabajos los hermanos deben omitir hacer cualquier referencia a los signos y baterías que no deben revelarse si no es a cubierto. Por ejemplo, quien oficia de Maestro de Ceremonias no debe dar los golpes del grado para llamar a tenida cuando los trabajos están cerrados, con un golpe es suficiente. Tampoco es correcto que Experto informe al Vigilante que el templo está a cubierto cargando el signo penal, debe hacerlo solo en posición firme y velada.
Hay logias, como la nuestra, que previo a verificar ritualicamente el templo, el Venerable Maestro pide “silencio en logia” a un golpe de mallete (sin develar el grado), luego invita a los hermanos a que dejen las preocupaciones y pasiones profanas afuera para adentrarse en los trabajos. Eso implica que está llamando a todos los masones presentes a cumplir con su primer deber en logia.
Esoterismo
El esoterismo en sentido amplio busca la comprensión del mundo desde lo interno. El templo “debidamente a cubierto” es el puntapié del trabajo esotérico que despliega una logia; al corroborarse el hermetismo, pueden encenderse las luces y develarse el conocimiento a los iniciados. Esta situación aplica tanto para el conjunto de obreros, ya que protege el conocimiento iniciático y alimenta el egregor; como para cada hermano en su introspección, ya que para aprehender el carácter iniciático de la orden es necesario que nuestro templo personal este a cubierto de toda profanidad, tal cual fuimos iniciados, sin nuestros metales.
Un par de Reflexiones:
Los Hermanos en Logia debemos estar vivenciando las tenidas con toda la atención y contemplación puestas en el rito y el símbolo, que es lo que verdaderamente forma al masón. La postura física, mental y emocional frente al ritual debe ser activamente masónica y no profana, es decir bien sentados (rectos), respetando el rito, sin estar conversando, mucho menos usando el celular ya que, además de romper la formas rituálicas, conecta con el mundo profano, abriendo una gotera tremenda que afecta a la armonía general y al trabajo particular que debe desarrollarse.
Los asuntos de Logia debemos tratarlos en Logia, con los métodos y formas masónicas, en las correspondientes cámaras según los grados. La transmisión masónica no debemos hacerla en los cafés ni en los asados en la vida profana, en este tipo de espacios solo podremos eventualmente hablar algún que otro tema con algún hermano y siempre teniendo la precaución de no dejar nada a descubierto, pero no son los espacios en donde buscamos la luz masónica.
La última reflexión es, que debo estar tranquilo con el ritual y la logia, que ya se encargan de ponernos a cubierto para trabajar, pero yendo al plano personal me despierta la idea de repetirme a malletazos mi deber de que cada vez que trabaje masónicamente debo ponerme a cubierto de mis propias pasiones profanas. Esto desde lo simbólico, ya que las pasiones están, pero cubrirme de ellas hace que me abstraiga, las visualice y las pueda cincelar.
CIENCIA – JUSTICIA – TRABAJO
H.·. Gustavo Balbarrey M.·. M .·.
